El pasado 9 de abril el Ayuntamiento de Solsona (Lleida) celebraba el acto de inauguración del nuevo tanatorio municipal que contó con la participación del presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn. Asimismo, este jueves 14 de abril, se llevará a cabo una jornada de puertas abiertas para todas las personas que quieran conocer las instalaciones.
El nuevo edificio, proyectado desde los Servicios Técnicos municipales, tiene una superficie construida de 1.021 metros cuadrados en planta baja. Se trata de un equipamiento integrado en el entorno, junto al casco antiguo y al complejo catedralicio de la localidad. Para ello, se han utilizado colores discretos y materiales nobles, entre los que en el exterior predomina la piedra, refuerzan esta integración.
Por su parte, madera de pino negro, hierro, piedra y cerámica visten el interior. Consta de tres salas de velatorio, cada una con acceso a un patio de luz interior. También con una sala de ceremonias con capacidad para 160 localidades ampliable por los laterales y la parte final, que da al jardín trasero. Además de los espacios públicos, existe una zona de trabajo y de servicios, con despacho, oficina de atención a las familias, sala de tanatopraxia, almacén y garaje, entre otros. Asimismo, se ha previsto la posibilidad de agrandar las instalaciones, si necesidades futuras lo requieren, con dos salas de velatorio más.
Alta eficiencia energética
Además de los aspectos estéticos y funcionales, el equipamiento funerario se ha planteado como un edificio de alta eficiencia energética. En primer lugar, se ha aislado el exterior y el interior de la fachada, así como la cubierta. Además, se han instalado placas solares de 32 kilovatios para generar la energía eléctrica necesaria para su funcionamiento y climatización.
Estas obras han tenido un importe de 1,7 millones de euros. Han sido subvencionadas por la Diputación de Lleida con 647.220 euros y el Departamento de Presidencia de la Generalitat, a través del Plan único de obras y servicios de Catalunya (PUOSC ), con 250.000 euros. La ejecución ha corrido a cargo de Excavaciones Vilà Vila, Anathomic Solutions, Alqui-Envas e Ilerfred, que, a su vez, han dado trabajo a una decena de proveedores y empresas locales.