Barcelona podría limitar las incineraciones
El Ayuntamiento de Barcelona ha reforzado el servicio de entierros en la ciudad para hacer frente al aumento de defunciones. Por ese motivo, teniendo en cuenta el incremento de la demanda de servicios que se han producido en las últimas semanas, el consistorio podría limitar, durante el tiempo que dure la emergencia sanitaria, el número de solicitudes de incineración para garantizar el servicio. La medida excepcional se aplicaría solo el tiempo necesario para que no se produzca ningún tipo de saturación y se ofrecerá a la familia la posibilidad de realizar un entierro provisional para que, pasados dos años, se pueda llevar a cabo la incineración sin ningún coste adicional.
Ante estas circunstancias el ayuntamiento catalán, también ha trasladado a la Generalitat de Catalunya la necesidad de restringir la presencia de familiares a las ceremonias de despedida esta semana para garantizar que no se produzca ninguna demora.
De forma paralela, hace dos semanas, el ayuntamiento, con anticipación a la situación derivada de la crisis sanitaria, ya reforzó los servicios funerarios de la ciudad con un protocolo de coordinación con las empresas funerarias y los centros hospitalarios, con la voluntad de garantizar el servicio y ofrecer un acompañamiento digno a las familias que han sufrido una pérdida. Este refuerzo, entre otras cuestiones, preveía la posibilidad de realizar 230 servicios diarios por parte de Cementiris de Barcelona y una ampliación de hasta 1.465 plazas de depósito en los tanatorios de la ciudad.
Además, para agilizar el proceso y quitar presión a los hospitales, también se ha hecho una asignación de los centros hospitalarios a las operadoras funerarias para poder trabajar de una manera ágil y coordinada y que responda a las necesidades básicas de la ciudadanía. En este sentido, Eloi Badia, presidente de Cementiris de Barcelona, ha agradecido la “labor titánica que están llevando a cabo los profesionales de las empresas de servicios funerarios”.
Por otro lado, también ha quedado fijado el precio máximo de los servicios funerarios básicos en la ciudad. A partir de ahora, ningún servicio básico podrá superar los 2.500 euros. El precio queda establecido en 1.948,10 euros en cuanto a servicios funerarios y 540 si se opta por enterramiento o 550 en caso de incineraciones. La Generalitat de Catalunya ha asignado la propuesta del gobierno municipal para garantizar el acceso universal a los servicios funerarios. También se mantiene la opción de acceder a los servicios bonificados o gratuitos en casos de familias en situación de vulnerabilidad o bajos ingresos.
Asimismo, el consistorio reforzará los circuitos de comunicación con las familias para que reciban toda la información sobre precios al inicio del proceso. El precio unitario del servicio básico, con IVA incluido, hace referencia a todos los servicios, desde el traslado a las instalaciones de la funeraria hasta el posterior enterramiento o incineración. Esto no excluye el derecho de los familiares a pactar un servicio superior con el precio correspondiente, si así lo desean. Las familias que opten por el servicio básico y dispongan de un seguro de decesos tendrán derecho a la devolución de la parte correspondiente.
Atendiendo a que las circunstancias actuales pueden suponer una tensión emocional para los familiares, Cementiris de Barcelona habilitará, una vez superada la crisis sanitaria, espacios dentro de los recintos funerarios para que los familiares puedan realizar una despedida sin ningún coste. Además, se ha habilitado un teléfono de apoyo emocional para las familias que ofrece atención de profesionales del Colegio Oficial de Psicología de Cataluña. También se ofrece la posibilidad de celebrar un servicio religioso a través de la Oficina de Asuntos Religiosos.
