CB fomenta la memoria histórica con rutas en el Fossar de la Pedrera
El Fossar de la Pedrera del Cementerio de Montjuïc es un espacio memorial dedicado a las víctimas de la represión y de los bombardeos franquistas. Fue inaugurado en 1985 como un conjunto arquitectónico de gran interés histórico, donde se encuentran, entre otros monumentos, la tumba del presidente Lluís Companys. Para darlo a conocer a los ciudadanos, Cementiris de Barcelona puso en marcha en 2013 visitas guiadas gratuitas al Fossar a cargo del historiador británico Nick Lloyd. Desde octubre del año pasado se han organizado un total de dieciocho rutas, con una media de veinticinco asistentes en cada una. La buena acogida de público hará que estas visitas se vuelvan a celebrar regularmente la próxima temporada, a partir del mes de octubre, según informa CB. La consolidación de esta nueva ruta cultural de Cementiris de Barcelona, que se suma a los paseos diurnos y nocturnos por los cementerios de Montjuïc y Poblenou y a las visitas guiadas a la Colección de Carrozas Fúnebres de Montjuïc, ayudará a que los ciudadanos puedan seguir descubriendo un espacio que contiene los restos mortales de las víctimas de la represión en la retaguardia y los bombardeos durante la Guerra Civil, pero también de un buen número de personas fusiladas en Barcelona durante la Posguerra. El guía Nick Lloyd, gran conocedor de la memoria histórica del país, acerca a los asistentes los detalles del Fossar, que contiene un proyecto memorial diseñado por la arquitecta catalana Beth Galí. Este está formado por un conjunto de columnas con los nombres de las víctimas, una gran zona ajardinada con lápidas singularizadas y el mausoleo de Lluís Companys. Cabe destacar también el espacio “In Memoriam” en homenaje a las víctimas del Holocausto, que construyó el arquitecto Leonard Glaser. Este está formado por un total de diez piedras, que sirven para recordar los diez campos de concentración nazis. Las rutas en el Fossar de la Pedrera refuerzan la voluntad de Cementiris de Barcelona de poner de manifiesto la relevancia histórica, cultural y arquitectónica de los recintos funerarios.
