Limbo presenta una nueva urna con algas marinas y sal

Limbo Europe, empresa que destaca por su capacidad de innovación para el sector funerario pone a su disposición, a partir de mayo, la nueva urna biodegradable ‘Oceanus Algae’, fabricada con sal marina y algas. Este nuevo producto combina materiales naturales y sostenibles para ofrecer una solución respetuosa con el medio ambiente.
La urna ‘Oceanus Algae’ está fabricada con sal marina y alga Ulva, procedente del Mediterráneo español. Esta alga, también llamada ‘lechuga de mar’ proviene de cultivos sostenibles realizados por empresas innovadoras que, entre otros usos, las aplican en biorremediación del entorno marino. A partir de ahora el alga Ulva añade un toque de color verde a la urna Oceanus que la hace atractiva y sobria.
Este nuevo modelo se une al catálogo de Limbo Europe aportando una estética y un material único en el mercado. Al igual que las demás urnas biodegradables de Limbo, es 100% natural y de rápida disolución. En solo cinco minutos, la sal de la urna se desintegra en el mar, liberando las cenizas. Las partículas de alga son inertes y se integran sin causar ningún efecto negativo en el océano. Este producto ha sido desarrollado específicamente para ceremonias de despedida en el mar, asegurando que no quede ningún residuo contaminante en el ambiente.
Dos décadas de trayectoria
Limbo Europe inicia con esta urna la celebración de sus 20 años en el mercado que le han llevado a ser un referente internacional en la fabricación y distribución de productos funerarios sostenibles.
“Tras el toque de color que aporta el alga hay muchas horas de desarrollo. Nuestro equipo ha trabajado arduamente para dar con un acabado que sea atractivo y al mismo tiempo mantenga la calidad. Estamos emocionados de haber podido relanzar la urna ‘Oceanus’ incorporándole esta innovación sostenible”, afirma Luis Nouel Trenard, CEO de Limbo Europe. “Seguimos apostando por dar al cliente final la posibilidad de hacer una despedida digna que incluya el retorno a la naturaleza.”
Consulta el artículo completo en el número 184 de Revista Funeraria.