El Cementerio Municipal de Ciriego (Santander) se ha sumado a los diferentes actos conmemorativos del 75 aniversario del incendio de la ciudad cántabra, que durante este año se están llevando a cabo desde la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Santander y cuya coordinadora del proyecto es la historiadora Raquel Peña.
El camposanto ha rendido su especial homenaje a esta efeméride con la celebración de la tercera edición de ‘Arte para la Eternidad’ que bajo el título ‘Arde Santander’, se ha englobado dentro de la Semana Europea de Cementerios (WDEC, por sus siglas en inglés), organizada entre los días 27 de mayo y 5 de junio por la Asociación Europea de Cementerios Significativos (ASCE), a la que pertenece el recinto funerario, y a la que se han unido diversos recintos funerarios, como fue el caso este pasado fin de semana del Cementerio de Sant Antoni Abat de Alcoy (Alicante), que ha organizado dos nuevas rutas el pasado sábado día 4 y domingo 5. Las visitas estuvieron guiadas por los historiadores Elisa Beneyto y Lluís Vidal, encargados de poner en valor el cementerio.
La visita al cementerio de Santander sirvió para rendir homenaje al alcalde Emilio Pino, los bomberos, el comercio de la ciudad, el fotógrafo Tomás Quintana ‘Samot’ y a los santanderinos que vivieron el incendio. “Los participantes pudieron acercarse al cementerio de Ciriego de una forma diferente y novedosa, a través de un paseo nocturno por la necrópolis en el que el arte, la poesía, la música y el teatro puso en valor la historia más reciente de la ciudad, y especialmente a figuras que jugaron un papel clave en el Santander de 1941“, explican desde el consistorio.
La ruta comenzó con una recepción y explicación histórica en la entrada principal del cementerio, y continuó junto a la sepultura de Emilio Pino, donde se recordó al alcalde que gestionó el desastre del incendio. Después, siguió junto a la Cruz Central del camposanto, donde se homenajeó a los bomberos que participaron en las labores de extinción del fuego y en la reconstrucción de la ciudad. El panteón de la Familia Pérez del Molino acogió la tercera estación del recorrido, con la que se puso en valor el esfuerzo de los comerciantes santanderinos para reabrir sus negocios tras el incendio.
‘Arde Santander’ recordó también al fotógrafo Tomás Quintana, Samot, que inmortalizó los momentos más duros y tristes de la ciudad. En esta parada, junto a su sepultura, se proyectaron algunas de sus fotografías más famosas del Santander incendiado.
La última parada, en la zona suroeste del cementerio, representó a los propios santanderinos que vivieron el siniestro y el resurgir de Santander. Durante toda la visita, la música, la poesía y el teatro acompañaron a los visitantes. En total, más de 80 personas se encargaron de las representaciones artísticas. Participaron el rabelista Chema Puente, los poetas Fernando Abascal, Carlos Alcorta, Eneko Vilches, Regino Mateo y Jaime Peña; alumnos de la Escuela de Artes Escénicas del Palacio de Festivales, agentes del Cuerpo de Bomberos de Santander, la Banda Municipal y el cuarteto vocal Música Mundi.