Grupo Enalta ha abierto las puertas del Tanatorio en Villava, en Navarra. Este nuevo espacio refleja el compromiso de la compañía por estar al lado de las familias en los momentos más difíciles ofreciendo un entorno cálido y humano donde cada despedida se convierte en una oportunidad para celebrar y honrar la vida de nuestros amigos y familiares.
“Con esta apertura queremos consolidarnos como la empresa de servicios funerarios de confianza para las familias navarras. Este nuevo espacio está pensado para ir más allá en el acompañamiento en el duelo. Nos ocupamos de todo el proceso de gestión del fallecimiento, personalizando cada detalle para que las familias encuentren en nosotros el apoyo que necesitan. Nuestro objetivo es honrar la vida de sus seres queridos con ceremonias donde todos podamos estar juntos, visualizando cada despedida como una oportunidad para rendir homenaje”, señala Octavio Martínez, director territorial de la zona norte de Enalta.
Las instalaciones de Enalta Tanatorio de Villava han sido diseñadas con el fin de ofrecer calidez y confort a las familias desde el primer momento. Desde el hall de entrada hasta la sala de ceremonias y salas velatorio, cada espacio busca preservar la intimidad y el recogimiento. La sala de atención familiar, en particular, está pensada para proporcionar un acompañamiento personalizado, mientras que los materiales naturales y los tonos cálidos en la decoración refuerzan el ambiente sereno y acogedor que define a la compañía.
El compromiso de Enalta con las familias navarras se refleja en su atención personalizada las 24 horas, servicios de inhumación e incineración, y opciones de financiación que se adaptan a cada necesidad. Las ceremonias y homenajes se realizan cuidadosamente, con la intención de cuidar cada detalle para que cada despedida sea única, auténtica y profundamente significativa.
Ubicado en el Polígono Industrial Landazábal (Calle A, 24, 31610 – Villava), el tanatorio ha sido concebido como un espacio accesible y acogedor, pensado para que las familias se sientan acompañadas en cada etapa del proceso. Enalta entiende que son los pequeños detalles los que transforman una ceremonia en algo inolvidable: las flores que evocan una esencia, las canciones que acompañaron momentos importantes, las historias que permanecen vivas en la memoria. Cada despedida, para Enalta, es una oportunidad para celebrar una vida vivida con amor y significado.