El pasado viernes, 22 de julio, se llevó a cabo la inauguración del Crematorio de Igualada (Barcelona), una construcción que dota a la capital y la comarca de Anoia de un servicio hasta ahora inexistente que será ofrecido gracias a dos hornos incineradores fabricados e instalados por Facultatieve Technologies Ibérica, dando así respuesta a la demanda creciente por parte de los habitantes de la zona que hasta el momento se veían obligados a trasladarse a otras comarcas.
La responsable del diseño del edificio ha sido la arquitecto Carme Pinós que, hace tres décadas, ya diseñó junto con Enric Miralles el proyecto original del Parc Cementiri Nou, recinto en el que ahora se ubica el nuevo equipamiento crematorio que entrará en funcionamiento el mes que viene.
El edificio, cuyos materiales predominantes son el hormigón, que le otorga un carácter escultórico, y los acabados cerámicos, que le confieren una dimensión más acogedora, dispone, además del equipo incinerador, de una sala de despedida, sala de espera y una pequeña sala para el último adiós.
Durante el acto inaugural, estuvieron presentes el alcalde de la ciudad, Marc Castells, acompañado de varios regidores del consistorio; el conseller de Cultura de la Generalitat de Catalunya, Santi Vila; la presidenta de la Diputació de Barcelona, Mercé Conesa; la delegada del Govern de la Catalunya Central, Laura Vilagrà; la diputada al Parlament de Catalunya, Maria Senserrich; la arquitecto Carme Pinós, alcaldes de diversos municipios de Anoia, y los administradores de Funerària Anoia, empresa concesionaria del servicio durante los próximos 45 años, así como el gerente de Facultatieve Technologies Ibérica, Juan Antonio Zarco, quien explicó las características de los hornos cuya firma fabricante se encuentra a la vanguardia en el ámbito de la incineración.