El pasado 30 de marzo, la Fundación Edad&Vida celebraba en la Torre DKV de Madrid las Mesas de Diálogo sobre ‘Acompañamiento al final de la vida’. En el marco del encuentro, la entidad valoró positivamente las diferentes iniciativas que se están llevando a cabo a nivel nacional y autonómico para el desarrollo de leyes que garanticen los derechos y la dignidad de las personas que se encuentran en la etapa final de sus vidas, en referencia a la reciente aprobación por parte del congreso de una Proposición de Ley de Derechos y Garantías de la Dignidad de la persona ante el Proceso Final de su Vida.
El encuentro contó con el apoyo de DKV y la colaboración de Fundación Mémora y Obra Social ‘La Caixa’, fue inaugurado por el presidente de la Fundación Edad&Vida, Eduardo Rodríguez Rovira; el director general de Seguros Generales y Vida de DKV Seguros y Ergo Seguros, Juanjo Mulero, y el director de Fundación Mémora, Joan Berenguer, y estuvo dirigido a profesionales especializados en el acompañamiento y la atención a personas que se encuentran en esta última etapa. Se abordaron aspectos como la espiritualidad, la contribución de los diferentes profesionales en este proceso y la necesidad de trabajar en equipo y junto a las familias.
Eduardo Rodríguez Rovira aseguró que “el acompañamiento al final de la vida tiene múltiples dimensiones y responde a una de las causas que defendemos firmemente desde nuestra Fundación: un final de vida digno y en paz”, explico Eduardo Rodríguez. “Por eso celebramos las diferentes iniciativas legislativas a nivel autonómico y central que se están desarrollando desde hace algún tiempo en este campo, con el objetivo de respetar la voluntad de las personas y garantizar el derecho a recibir cuidados paliativos“.
Los participantes en la jornada coincidieron en que la muerte sigue siendo un tabú entre amplios sectores de la sociedad. Es por ello que la Fundación Edad&Vida mostró su voluntad de continuar con la labor de sensibilización y formación sobre todos aquellos aspectos relacionados con el final de vida en los próximos años, organizando Mesas de Diálogo en diferentes ciudades de la geografía española.
Asimismo, se presentaron diversas propuestas innovadoras como el proyecto ‘Seniors en Red Conect@dos‘, el Servicio de Atención al Duelo de DKV y un programa sobre el papel de la enfermera como gestora del proceso final de la vida, de Servicios Funerarios de Barcelona (Grupo Mémora).
Según Julio Gómez, médico experto en cuidados paliativos del Hospital San Juan de Dios de Santurtzi, que ofreció una conferencia sobre la ‘Espiritualidad al final de la vida’, tres de cada cuatro personas deberán afrontar un proceso más o menos largo de final de vida y solamente una de cada cuatro morirá de forma repentina.
“Es necesario poner en valor la importancia de morir en nuestro domicilio habitual”, afirmó Emilia Civeira, experta en cuidados intensivos y profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad de Zaragoza. “La información al paciente y la capacidad para comunicarse con él es esencial para la aceptación de las situaciones de final de vida”.
Por su parte, Pilar Torrubia, médico de familia del equipo de atención domiciliaria de Zaragoza, afirmó que “en la atención domiciliaria al final de la vida es esencial escuchar al paciente y su familia“. “Son ellos los responsables de sus cuidados y hay que adaptarse a su situación”, indicó.
Por su parte, Raquel Sisas, enfermera y psicóloga del Hospital Juan de Dios de Zaragoza, explicó que los profesionales de los cuidados paliativos “deben tener vocación, una carácter equilibrado y formación específica“.
Resaltar que en Aragón existe desde 2011 una normativa que garantiza los derechos y la dignidad de la persona en el proceso de final de vida. Esta ley no solo establece y desarrolla los derechos que asisten a las personas en este trance, sino que también determina los deberes del personal sanitario que atiende a los pacientes durante este proceso y atribuye un conjunto de obligaciones para instituciones sanitarias, públicas o privadas, en orden a garantizar los derechos de los pacientes.
La normativa pretende de esta manera mejorar la calidad de vida y asegurar la autonomía del paciente y el respeto a su voluntad y valores vitales en la etapa final de su vida, siempre dentro de los límites reconocidos en la legislación básica en la materia. El resto de comunidades autónomas que tienen legislación en esta materia son: Andalucía, Asturias, Baleares, Canarias, Galicia, Madrid, Navarra y País Vasco.
Fuente: Servimedia