Establecido en 1896, Hartsdale es el primer cementerio contruido en Estados Unidos. El camposanto, que se encuentra en la ciudad de Nueva York, cuenta con más de 80.000 enterramientos y forma parte del Registro Nacional de Lugares Históricos.
Aunque la mayoría de las mascotas inhumadas en el recinto son perros, también se pueden encontrar gatos, aves, monos, caballos, lagartos e incluso personas, cuya última voluntad ha sido ser enterradas junto a su mejor amigo.