El Gobierno chino daba a conocer ayer, 2 de febrero, un estricto protocolo para hacer frente a los múltiples casos de infectados por coronavirus tanto en el país asiático como en otros países del mismo continente o incluso de Europa, América del Norte y Oceanía. Estas medidas nacen para frenar una epidemia que ya ha matado en China a 361 personas a causa de la neumonía.
En este sentido, el coronavirus que ha provocado la neumonía de Wuahn deja ya más de 17.000 casos en varios países del mundo y aunque la gran mayoría se han registrado en China, en total, fuera del país asiático, hay al menos 157 casos confirmados en 24 países, incluido España.
Según establece dicho protocolo para el tratamiento de los cadáveres y tal como recoge el diario La Vanguardia, los fallecidos a causa de este virus no podrán ser enterrados donde quieran sus familiares ni tampoco tener una ceremonia de despedida.
Asimismo, los restos de los fallecidos infectados deberán ser incinerados en una funeraria designada y cerca de donde están, sin que puedan ser transportados entre diferentes regiones ni preservados por entierro u otros medios, apunta el protocolo emitido por la Comisión Nacional de Salud, el Ministerio de Asuntos Civiles y el Ministro de Seguridad Pública.
De este modo, las ceremonias de despedida quedan prohibidas y los cuerpos deberán ser desinfectados y colocados en una bolsa sellada por trabajadores médicos y no se podrán abrir después del sellado. Por su parte, las funerarias deberán enviar personal y vehículos especiales para entregar los cuerpos de acuerdo con la ruta designada.
Recordar que la FIAT-IFTA, como asociación funeraria internacional, recomienda seguir los consejos y advertencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS).