La Fiscalía Anticorrupción solicita un total de 12 años de prisión para el exgerente de la Empresa Funeraria Municipal de Palma (Mallorca) Óscar Collado, quien entre los años 1989 y 2007 habría causado perjuicios de hasta 1,2 millones de euros a esta empresa pública, quedándose 206.000 euros procedentes entre otros de la venta de tumbas y ataúdes, y hasta 564.787 euros en concepto de comisiones, según informaba el pasado viernes Europa Press. El exalto cargo del PP será juzgado por estos hechos entre el jueves y el viernes de esta misma semana.
El Ministerio Público le acusa de presuntos delitos de malversación continuada, falsedad en documento mercantil, prevaricación, fraude a la administración y cohecho pasivo. Será la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Baleares la encargada de enjuiciar a Collado, quien se sentará en el banquillo junto a cuatro proveedores de la funeraria, los cuales se enfrentan a peticiones de entre tres y cinco años de cárcel.
Tal y como relata la acusación pública en su escrito de calificación provisional, Collado buscó enriquecerse a través de diferentes vías: presentando facturas inveraces o fraudulentamente alteradas por servicios inexistentes; apoderándose de cantidades que los particulares le entregaban; incrementando artificialmente el precio de los servicios prestados por los contratistas de la empresa y beneficiándose de este sobrecoste, o percibiendo comisiones.
Así, el acusado se apropió presuntamente de entre 42.000 y 87.000 euros de la funeraria tras recibir estas cantidades en metálico por la compra de tumbas, fondos que evitaba incorporar como ingresos de la empresa.