El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria deberá modificar el actual Reglamento de Cementerios, vigente desde 1974, para adaptarlo al nuevo Decreto de Sanidad Mortuoria publicado por el Gobierno de Canarias el pasado mes de enero, por el que los ayuntamientos deben asumir las competencias de tratamiento, traslado y enterramiento de personas sin recursos, hasta entonces responsabilidad del Ejecutivo autonómico, según informa el consistorio.
La concejala de Fomento, Servicios Públicos y Carnaval, Inmaculada Medina, se reunió ayer con representantes de todas las empresas funerarias que operan en el municipio, con gestores de la empresa Canaricen, concesionaria del servicio de cementerios, y de Mémora, responsable de los tanatorios municipales, para informarles sobre la entrada en vigor del nuevo decreto autonómico y las novedades que ello supone.
“Queríamos hacerles partícipes del traslado de competencias y de la situación actual. En este sentido, han mostrado su satisfacción por haberse podido reunir por primera vez, todos juntos, con un representante municipal”, explicó Inmaculada Medina, quien añadió que desafortunadamente, el traslado de esta competencia autonómica no está ligado a la aportación de recursos económicos para su desarrollo por parte de los municipios.
La concejala puntualizó que la modificación del Reglamento tiene que llevarse a cabo para incluir el apartado referido a Sanidad Mortuoria y que será la primera vez que se modifique este documento en más de cuarenta años. Con el objetivo de redactar un reglamento preciso y para fomentar la participación, el Gobierno municipal abrirá un registro de las funerarias que prestan servicio en Las Palmas de Gran Canaria, donde se especifique la actividad completa de cada una, y les remitirá, en su momento, el borrador de reglamento que se redacte, de manera que puedan realizar las aportaciones que estimen oportunas.
Inmaculada Medina explicó durante la reunión que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria sacará a concurso público el servicio de tratamiento, traslado y enterramiento de personas sin recursos.