Grupo Mémora ha analizado los beneficios de un entorno social positivo ante el final de la vida en la conferencia “Procesos de acompañamiento social ante del final de la vida”, que tuvo lugar la pasada semana en la torre DKV y a la que asistieron más de 80 personas. La ponencia, impartida por Ana Isabel Lima, presidenta de Consejo General del Trabajo Social de España, subrayó la importancia del acompañamiento social ante el final de la vida de los enfermos terminales. De esa manera se dignifica un momento crucial en la existencia de las personas y se contribuye a que el entorno del fallecido acepte la desaparición de su ser querido con mayor tranquilidad.
De la misma manera, Ana Isabel Lima destacó la importancia de la persona como punto de partida y eje de la intervención social de los profesionales, así como la necesidad de tener en cuenta el contexto de referencia de la persona: su hogar, familia o amigos. “Será muy importante extender el apoyo social que se ha ofrecido a la persona en fase terminal, a su familia y a las personas que le hayan acompañado en el proceso final de la vida para evitar duelos patológicos”, explicó Ana Isabel, quien hizo hincapié en la importancia de que la persona llegue al final de su vida “a su manera”, sin coacciones ni obligaciones y eso supone que los profesionales han de procurar todo el apoyo necesario, fomentando la participación del propio afectado y de todo su entorno.
Recordar que Lima es miembro del Consejo Asesor de Grupo Mémora, cuyo objetivo es el de reflexionar sobre el concepto de la muerte en la sociedad, el tabú que aún existe sobre ella y crear líneas estratégicas que promuevan valor añadido en la relación de la compañía con sus prescriptores en el ámbito de la sanidad, el sector socio-sanitario, residencial y comunitario.