Cerca de 4.800 personas fallecen en la última década a causa de un ahogamiento
En la última década, cerca de 4.800 personas han perdido la vida por un ahogamiento, una cifra que se ha reducido en los últimos 5 años en un 12%, y que refleja que, de media, aproximadamente 480 personas fallecen cada año por esta causa. Del total de fallecidos, 1.800 personas perdieron la vida en la piscina y en espacios naturales. El perfil con mayor riesgo se mantiene prácticamente constante cada año. Los ahogamientos afectan principalmente a las personas mayores de 60 años (40%) y en menor medida a los más jóvenes (8,5%). Llama la atención, sin embargo, que en la franja de menores de 15 años, las cifras de accidentes mortales han aumentado un 15% en los últimos cinco años. Estos datos forman parte de un estudio realizado por Fundación Mapfre, en el que se pone de manifiesto que Andalucía registra el 17% de las víctimas mortales por ahogamiento, convirtiéndose en la Comunidad Autónoma con mayor número de víctimas mortales.
Con la finalidad de evitar estos accidentes, dicha entidad, junto con la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES 061), ha dado a conocer hoy, 12 de julio, la campaña “Prevención de Ahogamientos 2016”, cuyo objetivo es trasladar a la sociedad las principales medidas de prevención para evitar accidentes en el entorno acuático y enseñar las pautas necesarias para saber actuar ante una situación de emergencia.
Dicha iniciativa, que se difundirá en las próximas semanas en las playas más importantes de las ciudades de Almería, Málaga, Granada, Cádiz y Huelva, hará hincapié, además, en que los adultos tomen conciencia de la importancia de vigilar adecuadamente a los menores de 10 años, franja de edad que comprende el 6% del total de víctimas mortales.
También se darán a conocer los principales factores de riesgo, técnicas básicas de supervivencia en el agua y de reanimación (RCP) y conocimientos elementales de primeros auxilios en caso de ahogamiento, formación que impartirán en plena playa técnicos especializados de los servicios de emergencias sanitarias a través de talleres gratuitos dirigidos a niños y adultos. Durante el acto, celebrado en la Playa de La Malagueta, en Málaga, ha participado la Infanta Doña Elena, directora de Proyectos de Fundación Mapfre, que ha estado acompañada del Alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; el director general de Fundación Mapfre, Julio Domingo; el delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Málaga, José Luis Ruiz; y Luis Olavarría, director Gerente de EPES 061, se han recordado además, algunas de las causas más frecuentes a la hora de sufrir un ahogamiento como: entrar en el agua sin atender las indicaciones del socorrista, no saber nadar o hacerlo sin la suficiente preparación y desconocer el medio en el queremos darnos un baño. También se ha apuntado que las horas a las que se producen más incidentes son entre las 12 del mediodía y las 14.00 horas y entre las 18.00 y las 20.00 horas; que la mayoría de los incidentes ocurren en lugares sin Servicio de Socorrismo o fuera de su horario; y que el mayor número de incidencias ocurren mientras el baño está permitido.
El director general de Fundación Mapfre ha subrayado la necesidad de que los centros impartan natación en las primeras etapas educativas, ya que a su juicio se trata del mejor modo para prevenir ahogamientos en la población infantil. También se ha referido a que desde Fundación Mapfre se está apostando de forma decisiva para que la formación en primeros auxilios llegue a toda la sociedad, sin exclusión de ningún grupo de edad y ha indicado como medidas preventivas clave la importancia de bañarse acompañado, de no alejarse de la orilla en espacios acuáticos naturales, como pantanos y lagos, de evitar comidas abundantes antes del baño, y de pedir ayuda al 112 o 061 cuando se ve a alguien en peligro. En este sentido, Luis Olavarría ha destacado durante el acto que los centros coordinadores del 061 en Andalucía atienden al año una media de 235 solicitudes de asistencia por ahogamiento, llamadas de auxilio que principalmente realizan socorristas, policías o bañistas que están siendo testigos en un momento dado de un incidente de este tipo. Según el director gerente de EPES 061, la mayoría de los accidentes que sufren los más pequeños se produce en las piscinas, mientras que los adultos son los que solicitan más peticiones de asistencia en las playas, especialmente por no respetar las señales de peligrosidad del mar y por no bañarse poco a poco justo después de haber comido o haber tomado el sol durante un tiempo prolongado.