Diversos expertos apuestan por revisar el concepto de muerte
Alrededor del concepto de muerte hay varios temas no exentos de controversias y, por ello, la Fundación Víctor Grifols i Lucas ha publicado un nuevo cuaderno que se centra en las cuestiones éticas, médicas y legales de la muerte cerebral y el Estado Vegetativo Persistente (EVP). El documento, disponible en la página web de la entidad bajo el título ‘¿Debemos revisar el concepto de la muerte?’, incluye artículos de James Bernat, profesor de Neurología y Medicina de la Universidad de Dartmouth, así como de otros expertos de varios ámbitos profesionales, quienes apuestan por revisar el concepto de muerte ya que los criterios que permiten afirmar con seguridad que la muerte se ha producido no están exentos de discusión. La identificación de la muerte encefálica como muerte del individuo ocasionó un amplio debate médico-filosófico en los años sesenta. Y aun cuando no se cuestiona del todo dicha identificación, el desarrollo de las investigaciones sobre neuroimagen y el mayor conocimiento de los trastornos de la conciencia humana inducen a plantear nuevos interrogantes de carácter clínico y ético.
El cuaderno intenta exponer algunas de las cuestiones más complejas respecto a la toma de decisiones en el paciente en EVP, como la dificultad de conocer sus preferencias y valores -que la mayoría de las veces no han sido expresadas ni se reflejan en el Documento de Voluntades Anticipadas (DVA), con lo que es la familia que debe tomar finalmente el papel decisor-; el marco jurídico, que según el texto no ayuda a trabajar estos casos con sentido común y proporcionalidad, y la dificultad en la retirada de soporte vital y todo lo que ello conlleva.
Finalmente, el documento plantea algunos interrogantes dirigidos a los profesionales de la salud: la retirada de tratamiento y soporte vital en pacientes con diagnóstico cierto de EVP, ¿es legal?; ¿debemos respetar la decisión familiar de no retirar medidas ni limitar tratamientos, manteniendo indefinidamente a estos pacientes?, y ¿tenemos el deber de acompañar psicológicamente a la familia y ayudarla a aceptar un final inevitable?