El proyecto “Ampadrina una mamá” asistirá en el parto a mujeres embarazadas en Uganda
Según Unicef la tasa de mortalidad materna en Uganda representa una de las más elevadas en el mundo, siendo de 440 muertes por cada 100.000 nacidos vivos, la gran parte prevenibles con una correcta atención sanitaria a las mujeres embarazadas. La falta de recursos logísticos y económicos lleva a que las mujeres den a luz en sus propios hogares, sin supervisión sanitaria. Y, ante cualquier complicación, no se puede dar solución por falta de conocimientos o medios, o bien por no poder realizarse el traslado de forma rápida a un centro sanitario.
Con el objetivo de mejorar el acceso y calidad de la atención materna-infantil en la región de Ikoba de dicho país africano Rafiki África y Grupo ASV se han unido para poner en marcha “Ampadrina una mamá”. Con este proyecto se ofrecerá asistencia gratuita en el parto a las mujeres embarazadas de la zona pero también sus revisiones y necesidades médicas antenatales y post parto. Se quiere así evitar, tanto como se pueda, los nacimientos en casas particulares sin atención sanitaria reduciendo así complicaciones y fallecimientos durante los mismos.
“Cuando esta ONG alicantina nos presentó este proyecto lo tuvimos claro. No podíamos dejar pasar la oportunidad de poder contribuir a poner en marcha este proyecto centrado en garantizar las condiciones sanitarias de las madres durante su embarazo, parto y post parto en una zona tan vulnerable como Uganda” explica Sonia Carricondo, responsable de Comunicación y RSC en Grupo ASV.
“Gracias a la implicación de Grupo ASV podemos arrancar con este proyecto en nuestro centro médico en Ikoba, Uganda, en funcionamiento desde febrero de 2022, teniendo garantizado con esta colaboración, como mínimo de momento, todo un año de atención maternal a las mujeres de la zona, donde se suelen superar los 400 partos anuales” explica Juan José Amirola Campa, presidente de la ONGD Rafiki África.
Según explican desde Rafiki África la realidad de muchas mujeres en Uganda es que viven en lugares aislados desde los cuales es difícil trasladarse a los hospitales. En la región de Ikoba han de trasladarse 40 kilómetros hasta el hospital de Hoima o 20 kilómetros hasta el de Kikuube, ambos del gobierno. Teniendo en cuenta la escasez de coches, las mujeres a punto de dar a luz han de desplazarse en moto hasta el hospital más cercano, siempre saturados en el área de maternidad, teniendo las mujeres parturientas que esperar su turno para dar a luz.
Esta ONG española ofrece en Ikoba ayuda sanitaria desde el centro médico que puso en marcha en 2022, Rafiki Euroval Health Center II. A día de hoy, están inmersos en la construcción de un pabellón de maternidad. Por esto es que se ha elaborado este proyecto, pues al tener dentro de poco más recursos y la capacidad de mejor y mayor atención al parto, pretenden incentivar a las mujeres a tener un parto seguro y con atención sanitaria de calidad.
“Contamos con una ambulancia, donación también en su momento de Grupo ASV, con la que dentro de este proyecto de “Ampadrina una mamá”, en caso de cualquier complicación, también se ofrecerá traslado gratuito al hospital de referencia” concluye Juan José Amirola Campa, presidente de la ONGD Rafiki África.
