En los últimos meses se ha puesto de manifiesto en diferentes medios de comunicación la problemática existente en Vizcaya y provincias limítrofes respecto al colapso de los crematorios en la zona, debido a la alta demanda del servicio de incineración. Revista Funeraria ha querido conocer la opinión de algunos de los profesionales funerarios que se ven afectados por esta situación, como es el caso de los propietarios de dos funerarias de Vizcaya que tienen problemas para la apertura de crematorios por parte de los ayuntamientos, ecologistas, patronatos y diferentes estamentos.
Por ello, en el próximo número de Revista Funeraria (nº 119 / jun.-julio’14) ofrecemos a nuestros lectores un reportaje en el que María Ascensión García de Andoin, gerente de Funeraria Aranguren, y Koldo Uribe, gerente de Funeraria Tanatorio Uribe, nos explican algunos de los inconvenientes a los que se enfrentan a día de hoy los funerarios, como es la infinidad de trámites burocráticos por los que deben pasar a la hora de solicitar la licencia de apertura de los crematorios, a los que hay que sumar la inquietud infundada de vecinos ante la posible instalación de estos centros de incineración.