El XX Concurso de Tanatocuentos ya tiene ganador
“El complot de los muchachos”, del profesor toledano de secundaria residente en Aranjuez (Madrid), Geovani Hiniesto Bazán, gana la XX edición del Concurso de Tanatocuentos, organizado por la revista Adiós Cultural y patrocinado por Funespaña con un premio de 1.500 euros.
El jurado, que se reunió telemáticamente el pasado 27 de marzo, también decidió reconocer como finalista al cuento titulado “A veces veo muertos” firmado por Miguel Sánchez Robles, de Caravaca de la Cruz (Murcia).
El jurado de la XX edición del Concurso de Tanatocuentos ha estado compuesto este año por Pilar García Moutón, profesora de investigación del CSIC y vicerrectora de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo; Carlos Santos, periodista y filólogo; Emiliano Cascos, redactor jefe de La Razón; Nieves Concostrina, periodista y escritora; Roberto Villar, escritor y guionista; Isabel Montes, coordinadora de Adiós Cultural (que además hizo las funciones de secretaria del jurado), y Jesús Pozo, director de Adiós Cultural y presidente de Fundación Inquietarte.
La razón de ser del ‘Complot de los Muchachos’, según su autor
“Mi relación con la literatura y la escritura está definida por el nombre de la carpeta del disco duro de mi ordenador que guarda, desde 1996, relatos de toda índole. Esta carpeta se llama afición. Una afición que se extiende también por una veintena de cuadernos del tipo Moleskine, pero normalmente de marcas más baratas. Nada he publicado ni he intentado publicar y tan solo puedo exhibir un logro en este terreno que fue cuando en el programa ‘La Ventana de la Cadena Ser’, Juan José Millás, que tenía una sección que venía a ser una especie de taller de literatura hace ya muchos años, magnífico, como todo lo de él, seleccionó algún texto mío para incluir en lo que llamó ‘El Diario de la Peste’ y que leyó en antena, para regocijo de mi madre y de algunos buenos amigos.
Desde 1998 soy Profesor de Secundaria en la especialidad de Economía. En el año 2003 tomé posesión de mi plaza en el IES Domenico Scarlatti de Aranjuez y desde entonces imparto mis clases de economía en este centro. De manera complementaria a esa, que es mi ocupación principal, desde el año 2006 soy también profesor Asociado en el Departamento de Economía de la Universidad Carlos III de Madrid.
Soy natural de un pueblo de Los Montes de Toledo y siempre oí hablar en mi pueblo del complot de los muchachos. La palabra complot resultaba como un invitado extraño en el ambiente rural y agrario en el que nos movíamos. Complot suena a política internacional, a pactos de traición y alta felonía, a película con trama de espías y guion intrincado. ¿Cabe la posibilidad de que complot y muchachos vayan juntos en alguna ocasión? ¿Es posible tan extraño maridaje? Así se lo decía a mi hermana mayor, a la que contaba nuevos detalles de la trama que había conocido en mi última visita al pueblo. Y fue ella, mi hermana, quien me animó a dejarlo por
escrito, el título y los detalles nuevos que conocí de manera casual. Y fue ella quien me puso sobre la pista del concurso Tanatocuentos. Y fue ella la primera lectora. Ella quizá sea la razón de ser del cuento”.
Geovani Hiniesto Bazán
