Entrevista a José Morales, gerente de ARCAE Grupo Unicoffin
ARCAE Grupo Unicoffin es una empresa familiar que lleva fabricando féretros desde 1955, siendo sus representantes la cuarta generación de fabricantes de ataúdes. La larga trayectoria de la compañía y una dilatada experiencia convierten a esta firma en uno de los proveedores de arcas de referencia de nuestro país. Tras la inauguración oficial de las nuevas instalaciones de la empresa –ubicadas en una parcela de 20.000 metros cuadrados en la que se centralizan todos los procesos productivos- hemos tenido la oportunidad de entrevistar a José Morales, gerente de ARCAE Grupo Unicoffin, quien además de hablarnos de la nueva fábrica y de la apuesta de ARCAE por la sostenibilidad, apunta cuál es la situación actual del sector de los fabricantes de ataúdes en España, entre otros aspectos.
El pasado 10 de mayo ARCAE Grupo Unicoffin celebraba un acto de inauguración oficial de la factoría con la que cuenta la firma en la localidad valenciana de Xàtiva, operativa desde 2020. ¿Qué ha supuesto para la firma este encuentro?
El acto de inauguración de la fábrica representó fundamentalmente una oportunidad para agradecer a todos los que nos han apoyado durante los últimos 30 años. Venimos fabricando ataúdes desde 1955, momento en el que Vicente Bolinches fundó la primera sociedad. Años más tarde volvimos a nuestra comarca, y en especial a Xàtiva, y por ello hemos aprovechado esta jornada para recordar la historia que nos precede y agradecer a todos y cada uno de los que, de una forma u otra, han hecho posible que hayamos podido dedicarnos de manera ininterrumpida a la fabricación de ataúdes a lo largo de cuatro generaciones. Las nuevas instalaciones son fruto del esfuerzo de un gran equipo compuesto por la plantilla de trabajadores, los clientes y proveedores, entre los que formamos una gran familia. Todos nos hemos apoyado en los momentos difíciles.
La anterior fábrica se encontraba en una ubicación diferente. ¿Por qué decidieron cambiar la localización?
En agosto de 2019 un gran incendio destruyó una importante parte de la fábrica en la que operábamos en aquel momento. Además, requeríamos de unas dependencias mucho mayores, así que ambas circunstancias nos llevaron a buscar una nueva localización que nos permitiese la expansión que necesitábamos.
El nuevo centro de producción dispone de la maquinaria más vanguardista y avanzada del sector a nivel tecnológico. ¿Cuáles son las principales características de la fábrica de ARCAE?
Cabe destacar que las naves están situadas en una parcela de 20.000 metros cuadrados y que existe la posibilidad de ampliar la superficie actual a medida que aumente la producción. Se trata de una parcela con dos grandes naves dedicadas al almacenaje de materia prima, carpintería, pulimentos y almacenaje de producto terminado. La principal ventaja de unas instalaciones con estas características es que todos los procesos productivos se centralizan en la misma planta. Este aspecto evita desplazamientos innecesarios entre centros productivos, minimizando los posibles problemas en el suministro de nuestros clientes, además de contribuir a la reducción de la huella de carbono.
¿Qué ha supuesto para la compañía contar con esta nueva factoría?
Gracias a las nuevas instalaciones y su ingeniería, estamos capacitados para mantener una producción certificada a lo largo de la cadena de suministro, con unos estándares de calidad elevados.
El incremento de precios de las materias primas está repercutiendo en diversos sectores. ¿También al ámbito de la fabricación de féretros? ¿Cómo se ven afectados los fabricantes?
Durante este año la tensión ha descendido y la frecuencia de los suministros vuelve a la normalidad. En cuanto a los precios, éstos se han estabilizado, pero en ningún momento han disminuido. Durante la crisis sanitaria y el inicio de la guerra en Ucrania hubo momentos de auténtica desesperación en los que todo el esfuerzo lo concentramos en conseguir materia prima, sin tener en cuenta el precio. Incluso así no siempre la podíamos conseguir.
Este encarecimiento de la materia prima, en este caso de la madera, ¿qué consecuencias tiene para los fabricantes?
Para los fabricantes la crisis ha permitido poner en valor el lugar que ocupamos en el mercado. El ataúd es un producto imprescindible sin el que no se puede llevar a cabo un servicio funerario. Hemos demostrado al sector que la producción nacional es suficiente para abastecer al mercado español, en el que no ha habido roturas de stocks durante la pandemia, momento en el que, a pesar de que no entraban en nuestras fronteras féretros procedentes de China, las empresas funerarias siguieron recibiendo sus pedidos de manera puntual, aunque la demanda era mucho mayor debido al incremento en las cifras de mortalidad. Lamentablemente, desde diciembre de 2022 hasta la fecha tres fábricas de ataúdes se han visto obligadas a cerrar definitivamente, debido a que no han podido repercutir los precios por el alza de la materia prima. A esta circunstancia hay que sumar que los fabricantes todavía en activo han visto reducida su producción debido a los productos importados.
¿Podría desembocar la situación actual en un desabastecimiento de producto?
A través de Iberataud, los fabricantes estamos informando a los funerarios de la paradoja que se puede producir, ya que son ellos quienes tienen la solución en sus manos: la entrada masiva de importaciones chinas y la baja mortalidad provocaría un debilitamiento de la producción nacional. En ese caso, el mercado quedaría copado por productos asiáticos y, en el momento en el que las importaciones cesasen por cualquier circunstancia, como un incremento de los fletes o el cierre de puertos chinos, situaciones que ya vivimos durante los años 2021 y 2022, y que pueden volver a repetirse por cualquier circunstancia geopolítica, la situación sería crítica para las empresas funerarias, las cuales sufrirían un acusado desabastecimiento, al no existir suficiente producción nacional.
Desde el mes de mayo, a raíz de la publicación del nuevo Reglamento Europeo de Deforestación (o EUDR, por sus siglas en inglés), los ataúdes importados se someten a un riguroso control de la trazabilidad del producto. ¿Es esta una iniciativa relevante?
Considero que es imprescindible. Es la única forma de proteger el producto nacional y garantizar los suministros de cara al futuro. Necesariamente, la fabricación nacional debe reforzarse y conseguir una estabilidad que todavía no tiene. Como se ha demostrado, hemos sido capaces de suministrar la avalancha de demanda ocasionada por la pandemia y, una vez probada la capacidad de respuesta de los fabricantes nacionales, debemos ocupar el puesto que merecemos.
Conscientes de la importancia de contribuir a la conservación del medio ambiente, Iberataud adoptó para todos sus miembros un compromiso total para tratar de mejorar día a día la calidad de la gestión medioambiental en sus procesos de fabricación, servicios y actividades. ¿Qué medidas medioambientalmente responsables llevan a cabo desde su compañía?
ARCAE se encuentra comprometida de manera fundamental con el medio ambiente. Por ello, el 95% de la fabricación es producto ecológico certificado. A esto se suman las mejoras en aras de la sostenibilidad realizadas en nuestras instalaciones, donde disponemos de una planta fotovoltaica de 120 kw. que genera el 60% de la energía consumida actualmente, evitando así la emisión anual de 60 toneladas de CO2 a la atmósfera. Por otra parte, durante 2023 iniciamos un nuevo proyecto ‘Residuo Cero’, mediante el que damos una segunda vida a los recortes resultantes de la madera.
Tras unos años complicados debido a la pandemia y la coyuntura económica, ¿cómo encara la compañía los próximos meses?
ARCAE se consolida gracias a la confianza que otorgan los principales grupos funerarios de España. Si ellos siguen apoyando el producto nacional justo y certificado, dadas las ventajas del producto español y los riesgos de los artículos de importación, podremos seguir ofreciendo productos de calidad a las empresas funerarias.
La nave se ubica en La Costera, la principal comarca productora de féretros en nuestro país. ¿Qué ventajas ofrece esta localización?
La proximidad de los suministros es fundamental. Tenemos que pensar que la Comunidad Valenciana es la principal productora de muebles y la comarca de La Costera es la que mayor volumen de ataúdes fabrica en España. La cifra de producción ronda el 50% del total nacional.
¿En qué se diferencian estas instalaciones de otras factorías del sector?
Nos diferenciamos por nuestra experiencia de más de 30 años, nuestra energía y enfoque innovador, así como por ofrecer productos ecológicos certificados. Desde ARCAE Grupo Unicoffin combinamos la solidez de la experiencia de cuatro generaciones con la frescura de nuevas ideas que aportan los representantes más jóvenes de la compañía. Todo ello, mientras nos comprometemos con la sostenibilidad y el cuidado al medio ambiente.
ARCAE fue una de las grandes firmas protagonistas de Funermostra 2021. ¿Tienen previsto participar en la convocatoria de este año? ¿Qué esperan de esta nueva edición?
Espero que la próxima convocatoria de Funermostra en octubre de este año sea todavía mejor que la anterior. Me siento optimista en este sentido y todos los datos apuntan a que el nivel de participación superará al de la pasada edición de 2021. Funermostra se consolida como la cita ineludible para el sector, ya que es un foro de reunión para todos los actores del mercado. La repercusión mediática de la convocatoria anterior, tanto del salón en sí como de nuestro stand, será difícil de superar, pero intentaremos sorprender de nuevo a los asistentes.
