La diferencia entre nacimientos y defunciones es la más baja desde el año 2000
El crecimiento vegetativo de la población residente en España -es decir, la diferencia entre nacimientos de madre residente en España y de defunciones de residentes en el país- se redujo un 30,7% en 2013 hasta situarse en 36.181 personas. Es el saldo más bajo desde el año 2000, según informa el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Durante 2013 nacieron en España 425.390 niños, un 6,4% menos que en el año anterior. El número de nacimientos registra así su quinto año consecutivo de descensos. Desde 2008, cuando nacieron 519.779 niños (el máximo en 30 años), el número de nacimientos se ha reducido un 18,1%. La tasa bruta de natalidad (número de nacimientos por cada mil habitantes) bajó hasta 9,1 desde los 9,7 de 2012. Se mantiene así la tendencia decreciente iniciada en 2008.
El descenso de los nacimientos tuvo su origen en una menor fecundidad pero también en la progresiva reducción del número de mujeres en edad fértil. De hecho, el número de mujeres entre 15 y 49 años desciende desde 2009 debido a que llegan a ese rango de edades generaciones menos numerosas (nacidas durante la crisis de natalidad de los 80 y primera mitad de los 90), al menor aporte de la inmigración exterior y al mayor número de emigraciones al exterior durante estos últimos años.
En cuanto a la mortalidad, durante 2013 fallecieron en España 389.699 personas, lo que supuso un 3,3% menos que en el año anterior. La tasa bruta de mortalidad se situó en 8,3 defunciones por mil habitantes, frente a los 8,6 de 2012.
La esperanza de vida al nacimiento aumentó respecto al año anterior en 0,6 años y se situó en 82,8 años. Por sexo, en los varones alcanzó los 80,0 años (0,7 años más) y en las mujeres los 85,6 (0,6 más).