Cosabal, garantía de calidad y profesionalidad

Fundada en el año 1985, Cosabal es una central de compras dedicada a la comercialización de artículos funerarios, cuyo principal objetivo desde su creación ha sido ofrecer a los clientes las máximas garantías de servicio y calidad a un precio competitivo. Para su cometido, la empresa cuenta con unas instalaciones en la localidad barcelonesa de Lliçà de Vall de más de 2.000 m2, donde almacenan todos los productos, garantizando un stock permanente y cumpliendo con los tiempos de entrega y la normativa vigente. Asimismo, Cosabal mantiene su firme compromiso por una producción cada vez más sostenible, así como su apuesta por proveedores de proximidad. En el año 2021, Cosabal estrenaba nueva imagen corporativa fruto de la propia evolución de la compañía y de su deseo de conectar de manera más efectiva con sus clientes y el mercado actual.

“Cosabal se crea en abril de 1985 con el objetivo de realizar compras conjuntas de féretros entre los socios fundadores, a través de un almacén regulador, mejorando de este modo las condiciones de compra. Este propósito inicial, no solo se ha mantenido, sino que se ha visto reforzado mediante la incorporación de otros artículos necesarios para ofrecer un servicio integral a los tanatorios. Con el tiempo, nos hemos ido adaptando a los cambios y nuevas demandas de los clientes, siempre priorizando la calidad y excelencia del servicio prestado”, señalan desde la empresa.

Cosabal ha estado dirigida en las últimas dos décadas por Alfonso Ibarguengoitia, quien ha impulsado el crecimiento y expansión de la compañía, y que a finales de año pasará el relevo a Jesús Pérez, que tras unos meses desde su incorporación a la empresa se convertirá en el nuevo gerente. Entre los objetivos actuales de la firma, se encuentra el “seguir ampliando su presencia tanto en el mercado nacional como internacional”.

A lo largo de estos casi 40 años desde su creación, Cosabal ha ido creciendo y evolucionando con la incorporación en su oferta de todo tipo de productos funerarios, y sobre todo a raíz del traslado hace dos décadas del almacén de Begues (Barcelona) a la actual nave ubicada en Lliçà de Vall. “Una ubicación que posibilitó una mejor logística para nuestra central de compras.” Además, en aquella época se decidió incorporar a profesionales con dedicación exclusiva a la empresa, con el fin de asegurar un alto nivel de competitividad y operativa: “Actualmente, en Cosabal trabajan 4 personas a tiempo completo. Y es que, lo que inicialmente era un proyecto pensado para prestar servicio a los socios, hoy en día funciona como una central de compras abierta a todo el sector funerario en España”.

Las instalaciones de Cosabal constan de 2.000 m² de almacén y 1.400 m² de oficinas, y facilitan el trabajo eficiente y la organización de las distintas gamas de producto. Además, la nave es propiedad de Cosabal, lo que refuerza su compromiso y estabilidad en el sector funerario.

Producción sostenible y de calidad

En cuanto a los productos que comercializa hoy en día Cosabal, la empresa apunta: “Todos nuestros artículos están diseñados para satisfacer las necesidades de los profesionales del sector y de las familias que buscan rendir homenaje a sus seres queridos. Entre nuestra oferta, destacaríamos quizás los féretros ecológicos, elaborados con materiales sostenibles y maderas certificadas, minimizando así el impacto ambiental; las urnas ecológicas y biodegradables fabricadas con materiales naturales como la arcilla, arena, papel reciclado, entre otros, las cuales están diseñadas para ser integradas en el medio ambiente de manera 100% segura, o nuestra colección de joyería cineraria con piezas que pueden contener una pequeña porción de cenizas o cabello, permitiendo a nuestros clientes poder llevar consigo un recuerdo tangible de sus seres queridos”.

Sobre la propia evolución del sector, Cosabal señala que las tendencias han ido cambiando en los últimos años, sobre todo encaminadas hacia una producción sostenible comprometida con el cuidado del planeta: “Más del 90% de los féretros disponibles en nuestro catálogo son ecológicos, fabricados con materiales sostenibles y respetuosos con el medio ambiente”.

Otro aspecto a destacar es que trabaja con proveedores locales y de proximidad: “En torno al 95% de nuestros proveedores tanto de materia prima como de producto acabado son de ámbito nacional. De esta manera, contribuimos a reducir la huella de carbono asociada al transporte de materiales, disminuyendo el impacto ambiental y apoyando la economía local”.

También ha desarrollado un peso importante en los servicios funerarios la irrupción de las nuevas tecnologías. “Disponemos de un software de gestión y control de nuestros stocks depositados en las instalaciones de nuestros clientes, permitiéndonos tener monitorizado en tiempo real nuestro inventario, alertándonos del stock y beneficiándonos de una mayor precisión en el cumplimiento de pedidos.”

La empresa también apuesta por las energías renovables y la gestión de residuos, tanto en la producción como en el almacenaje, promoviendo el reciclaje y la reutilización de materiales. “Estas prácticas, además de una reducción de costes, han hecho posible mejorar la percepción de calidad y de concienciación medioambiental que tienen los clientes sobre nosotros y nuestra oferta.”

Una de las claves del éxito de Cosabal es su Sistema de Gestión de la Calidad, el cual garantiza que todos sus procesos, productos y servicios cumplan con los más altos estándares de calidad y satisfacción del cliente, basándose en el cumplimiento de la norma internacional UNE-EN ISO 9001:2015, que establece los requisitos para un sistema de gestión de la calidad eficaz y eficiente. “Esta certificación, reconocida a nivel global, demuestra nuestro compromiso con los estándares internacionales de calidad y proporciona más confianza y satisfacción a nuestros clientes. Internamente, fomenta la mejora continua y el desarrollo profesional entre el personal, lo que contribuye al crecimiento y éxito a largo plazo de la empresa.”

Formación continua

“La formación continua y el desarrollo profesional de los empleados son pilares fundamentales que contribuyen al éxito y al crecimiento de nuestra empresa.  Además, creemos firmemente que esto hace aumentar el bienestar, la motivación y la satisfacción de nuestro equipo. Invertir en el personal no solo mejora la competencia y la calidad, sino que también crea un entorno de trabajo positivo y dinámico, donde todos los compañeros estamos motivados para contribuir en la mejora de nuestra organización”, señalan desde la dirección de Cosabal.

Sobre los objetivos actuales y las últimas novedades de la firma, apuntan lo siguiente: “Nuestro objetivo actual, y a corto plazo, se centra en el crecimiento de nuestra familia de productos sostenibles, haciendo hincapié en las gamas de féretros y urnas, los artículos más demandados. En ese sentido, vamos a incorporar productos elaborados con las materias primas sostenibles más innovadoras. También estamos trabajando en la incorporación de una gama de complementos cinerarios ‘premium’. Por otro lado, queremos establecer nuevas alianzas con organizaciones y empresas que compartan nuestro compromiso con la sostenibilidad, ampliando así la red de proveedores y socios que contribuyen a una producción responsable”.

Unos propósitos que Cosabal tiene previsto compartir con otras empresas del sector y con sus clientes en los diferentes encuentros funerarios que tendrán lugar en los próximos meses, entre ellos el Fórum Panasef que ha acogido la ciudad de Bilbao los días 17 y 18 de octubre o nuestro Simposium Funerario de 2025 que celebraremos en Salamanca.

Entrevistamos a Alfonso Ibarguengoitia. Gerente de Cosabal

En los próximos meses, y tras 20 años dirigiendo la central de compras, Alfonso Ibarguengoitia, se despide del sector funerario para iniciar una nueva etapa vital a raíz de su jubilación. En esta entrevista, Alfonso hace balance de su trayectoria profesional, analiza cómo ha evolucionado en los últimos años la compañía y los servicios funerarios en general, y dedica unas palabras a su sucesor, Jesús Pérez

¿Cuándo y cómo inició su etapa profesional en Cosabal? ¿Cuáles han sido las etapas más complicadas? ¿Qué momentos recuerda con más cariño?

Accedí a la Gerencia de Cosabal en enero de 2004, después de pasar por un proceso de selección de personal. Una de las primeras gestiones que me encomendaron fue la compra de una nave adecuada, tanto en metros como en acceso, para mejorar los aspectos logísticos y el servicio ofrecido a los clientes. Actualmente, esta nave está situada en Lliçà de Vall (Barcelona). Al principio, solo se comercializaban ataúdes y alguna gama de urnas. Con los años se han ido incorporando al catálogo de la empresa el resto de productos necesarios para brindar un servicio funerario completo: relicarios, joyas cinerarias, instrumental y productos químicos, etc. Desde Cosabal nos hemos ido adaptando a las nuevas necesidades de los clientes, centrándonos en la búsqueda de productos sostenibles.

En cuanto a la etapa más complicada que he vivido fue, sin duda, el año de la aparición del COVID. Fueron unos momentos de mucho estrés debido a las necesidades de productos que escaseaban y que eran muy complicados de conseguir.

¿Cómo cree que ha cambiado el sector funerario a lo largo de estas últimas décadas?

Echando la vista atrás, los cambios experimentados en el sector han sido muchos y de gran impacto. En primer lugar, la aparición de tanatorios; antes, la mayoría de difuntos se velaban en los domicilios u hospitales. La proliferación de tanatorios en España en los últimos 35/40 años ha sido uno de los cambios más importantes. Por otro lado, el aumento de la incineración que ha supuesto la instalación de un gran número de hornos crematorios en el país y ha permitido a las familias que el desplazamiento del lugar donde se celebra la ceremonia de despedida hasta el crematorio sea mucho más corto de lo que era hace unos años, cuando solo las grandes capitales disponían de instalaciones donde poder realizar la incineración.

La cada vez mayor concienciación, tanto por parte de las empresas como de la sociedad en general por el Medio Ambiente, ha provocado que casi la totalidad de los féretros sean ecológicos, y que existan más opciones de urnas cinerarias ecológicas y vehículos eléctricos para realizar los traslados de difuntos. En definitiva, la preocupación del sector por el cuidado y protección del planeta se refleja en todas y cada una de las decisiones relativas al diseño y fabricación de productos.

Por último, hacer constar la importancia que tiene para las familias la celebración de la ceremonia de despedida. Es el acto en el que los familiares rinden homenaje a la persona fallecida y, por este motivo, se prepara con la máxima conciencia y esfuerzo para que sea un momento inolvidable.

¿Cómo ve el sector en los próximos años?

Creo que el sector va a estar marcado por dos cambios significativos: por un lado, la creciente conciencia sobre la sostenibilidad, que va a suponer que tengamos que ampliar nuestro portfolio de productos ecológicos; y por otro, el aumento de ceremonias personalizadas, y es que, cada vez más las familias buscaremos despedir a nuestros seres queridos de una forma única y significativa.

En pocos meses cierra su larga etapa en Cosabal. ¿Qué balance hace de su trayectoria?

Durante estos 20 años he tenido la oportunidad de vivir numerosos logros y enfrentar diversos desafíos que me han permitido crecer a nivel personal y profesional.  Uno de los mayores éxitos ha sido ver cómo nuestro personal ha alcanzado metas importantes y ha superado las expectativas. Me siento especialmente orgulloso de nuestra capacidad de reacción en el año de la pandemia, fruto de la profesionalidad y la capacidad de trabajar en equipo de todos los que formamos parte de Cosabal. No todo ha sido fácil. Hemos afrontados retos que pusieron a prueba nuestra resiliencia y habilidades. Superar estos obstáculos nos ha fortalecido y nos ha enseñado valiosas lecciones que nos han ayudado a mejorar como empresa. Mi tiempo en Cosabal ha sido una etapa de crecimiento y aprendizaje constante. He aprendido a adaptarme a los cambios, a liderar con empatía y a valorar la importancia de la colaboración. Estoy muy agradecido por cada experiencia vivida.

¿Qué consejo le daría a la persona que lo relevará en el cargo?

Quisiera decirle a mi sucesor, Jesús, que es fundamental construir relaciones sólidas con el equipo. Conocer sus fortalezas y áreas de mejora le permitirá liderar de manera más efectiva y fomentar un ambiente de trabajo positivo. Y quiero animarle a que continúe con la visión de crecimiento e innovación de la empresa para que siga siendo relevante y competitiva. Y que se muestre abierto al feedback tanto del equipo como de los clientes. La disposición para escuchar y recibir sugerencias enriquecerán la toma de decisiones y fortalecerán la cohesión del equipo.

Y para finalizar, quiero aprovechar esta oportunidad para agradecer a todas y cada una de las personas que me han acompañado a lo largo de estos años. Hasta siempre

Ver el artículo completo en el número 180 de Revista Funeraria.

 

Hoy recordamos la primera aparición de Cosabal en Revista Funeraria